Es sabido por la mayoría de las personas que han estado pendientes del debate sobre la educación en Chile, que el sistema educacional chileno es uno de los que tiene una mayor segregación. Esto se ve reflejado en los índices de pruebas internacionales (1) y nacionales (2). El índice de Duncan en la Educación y el Indice de Gini, son los fantasmas del sistema político-económico que tratan de sacar a flote los actuales lideres de los partidos de la Alianza, disfrazando las palabras textuales del plan desarrollado por los chicago boy's conocido como "El Ladrillo" (3) y reviviendo el discurso de Jaime Guzmán sobre la educación gratuita y los problemas que genera el sistema universitario (4). También, han sacado toda su artillería editorial y académica para justificar su modelo, esto se evidencia en el notable incremento de libros y publicaciones de investigaciones cuantitativas (incluso algunas de estas con metodologías un tanto extrañas) que se utilizan para argumentar, muchas veces falazmente, las actuales políticas sociales, económicas y educativas, que curiosamente vienen en su mayoría de la PUC y de la editorial de el diario El Mercurio.
Bueno, no les quitaré mérito con su habilidad en los números y para hacer gráficos complicados, y tampoco les contra argumentaré que la mayoría de sus medidas tendrán una influencia en los instrumentos de medición en un mediano plazo, pero hay algo que olvidan, algo totalmente lógico: Si todo el sistema está hecho para elevar los resultados de una prueba que ya se conoce, pues, es muy probable que esto ocurra. Pero, ¿es un SIMCE superior a 300 lo que necesita la sociedad chilena de su educación? ¿Qué piensan ustedes de una persona que se prepara durante meses para rendir una prueba y le va bien? ¿No es lógico que así sea? Al comienzo en Chile no resultó tan fácil, por que habían diferencias entre las escuelas donde estudian niños y niñas con gran capital cultural de base y otros donde estudian niñas y niños vulnerados con una notoria privación cultural, en otras palabras, estudiantes de un estrato socioeconómico favorecido y otros vulnerados. Los tecnócratas tuvieron tiempo para realizar los diagnósticos sintomáticos y comenzaron a llover reformas: más TIC's, el Plan de Apoyo Compartido PAC (este principalmente terrible) (5), Ley SEP, etc. Pero, cabe preguntarse ¿Estarán viendo el problema de fondo? ¿Qué están entendiendo por educación estos tecnócratas?
Humildemente (quizás hasta ingenuamente) y sin mayor base que mis desesperadas búsquedas de razones lógicas para emitir este comentario y la experiencia de estar en contacto constante con escuelas y liceos muunicipales y particulares subvencionados, creo que quienes están ideando las políticas educativas desde arriba están concibiendo a la escuela como una unidad separada del todo que es la sociedad y están creando mundos ajenos al contexto cultural que provocan efectos muy nocivos en el comportamiento social por el conflicto que se produce por vivir en diferentes culturas simultáneamente pero paralelamente, osea, sin aparentes puntos de encuentro.Ahora, no se si este considerar la escuela como unidad separada del todo, lo harán de manera deliberada o por omisión.
En este punto correré el perímetro de mi análisis más hacia el campo subjetivo. Hoy resulta muy frecuente escuchar conversaciones y comentarios que denotan una violencia intercultural y una separación entre los diferentes mundos que existen en Chile, ejemplos de esto tenemos lamentablemente por montón, es cosa de escuchar a hablar a alguien de una condición socioeconómica favorecida o de un entorno cultural clasificado como Media Alta o Alta sobre los Flaites, los Sopaipilla, los washiturros y tanto nombre que hay para calificar a quienes se visten con una estética determinada o escuchan algunos estilos musicales relacionados a los barrios marginados, lo hacen con un tono despectivo, violento incluso con temor, o lo caricaturizan para hacerse chistes entre ellos de algo que no quieren ser por ningún motivo. Pero en la contraparte, también es común escuchar hablar con mucha violencia y resentimiento sobre los cuicos, pitucos, fachos, etc. Es común visualizar este tipo de situaciones de igual manera en la política, gracias a la UDI principalmente tenemos varios ejemplos como la situación del Twiteo que amenazaba de muerte a Camila Vallejos, una que otra de Labbé, el militante UDI que mandó a los magallánicos a apagar el incendio de Torres del Paine con su bandera regionalista cuando estos solicitaban ayuda y por la contraparte muchos comentarios deseándole la muerte a los multimillonarios chilenos que dominan todas las áreas del sistema que fue público y explotan los recursos naturales sin importar su impacto ambiental y social, o por su manejo de los medios de comunicación a su favor.
Tristemente el escenario nacional se transforma en una actuación llena de monólogos interrumpidos, descalificaciones estereotipadas, violencia física y simbólica donde nadie gana, muchos pierden y algunos se hacen millonarios. Es claro ver como en el intento fallido de diálogo entre estudiantes y gobierno, ambos afirman querer mejorar la educación, pero ninguno acepta al otro como interlocutor válido, y prima el status quo o lo que digan los que tienen el poder político.
La segregación tiene efectos que van más allá de los números, hace que no nos entendamos, que yo no sepa que existen otros Chile, dónde se come bien, o dónde no se come, dónde todo depende de si quieres o no y el empeño que le pongas, o dónde debes saltar todos los obstáculos imaginables para acceder a un derecho básico y de manera precaria. El ser humano tiene la capacidad de ser empático, pero el modelo social, político, económico y escolar, nos limita su desarrollo, resumo en una pregunta todo esto ¿Cómo nos vamos a entender, si ni siquiera nos conocemos?
Entonces, ¿Qué es necesario entender sobre educación y desigualdad? pues como lo dije en mi intervención en el senado en Agosto del 2011 (6), para pensar cambios en educación, se deben pensar junto al contexto en el que se hacen y formar para la autonomía y no para la sumisión, haciéndose cargo como sociedad en su conjunto de los índices de desigualdad, procurando que el sistema escolar no reproduzca las desigualdades sociales existentes hoy en Chile.
Con esto no ofrezco ni promuevo un modelo educativo innovador y aplicable a todo el país, sería un error gigantesco y que muchos cometen (7), a pesar de que existen experiencias de éxito, estas guardan correlación con una multiplicidad de factores específicos de estas experiencias, y se demuestra en que estas siguen siendo excepciones, pero quiero hacer énfasis en la necesidad de reducir la segregación en escuelas para favorecer los diálogos interculturales y el desarrollo de la sociedad de una manera más solidaria y igualitaria en derechos, terminar con el financiamiento compartido y las pruebas de selección, promover la creación de proyectos educativos originales y que respondan a las necesidades de la comunidad, ni el Estado ni el Mercado pueden determinar lo que pasa con la educación y las escuelas, solo la sociedad en conjunto y en diálogo real podrá encontrar el camino, de la mano de un profesorado y una academia muy bien preparada para estos nuevos desafíos. Cómo escuché en una de las tantas clases públicas realizadas en la plaza de La Serena durante la movilización estudiantil "el país debe marchar al ritmo de los más desfavorecidos", desde mi punto de vista es la única manera de que vayamos todas y todos juntos.
(1) Estadísticas de las pruebas PISA.
(2) Ver resultados SIMCE por nivel socioeconómico de la última década.
(3) El Ladrillo: Bases de la política económica del gobierno militar en Chile, 1992, CEP.
(4) Ver Revista Realidad de Marzo del 81, especial atención en la página 30. http://es.scribd.com/doc/58343717/Revista-Realidad-marzo-1981
(5) Plan de Apoyo Compartido, www.apoyocompartido.cl, En pocas palabras, les entregaban a los docentes todo lo que tenían que hacer en cada clase, con planificaciones hechas (externamente) y luego eran evaluados todos externamente para ver los avances cada 6 semanas.
(6) Ver video "Estudiantes en el congreso 16 agosto del 2011, Valparaíso", minuto 29.
(7) El modelo educacional chileno es una quimera de modelos extranjeros, y los proyectos educativos de muchos establecimientos también han sido importaciones del extranjero, ninguno de ellos es conocido por sus logros en el fomento de la cultura local y por romper con las brechas socioeconómicas.
0 comentarios:
Publicar un comentario
Se agradecen las preguntas y comentarios =)